Así está la economía de las pymes a mediados de 2022: Termómetro Lyseis - LYSEIS

Así está la economía de las pymes a mediados de 2022: Termómetro Lyseis

A punto de cumplir medio año de este 2022, ¿cómo está la situación económica en general? ¿Y la economía de las pymes en particular? Desde Lyseis analizamos de forma sencilla en este artículo los principales indicadores económico-financieros y su efecto sobre las pymes. El objetivo de este análisis es acercar a las pymes este conocimiento económico en base a las valoraciones de nuestros consultores con respecto a cómo impactan los cambios económicos que se van produciendo en la actualidad en las variables fundamentales de gestión de las pymes.

Compartimos el Termómetro Lyseis, una infografía en la que puede entenderse de manera fácil y rápida el punto en el que se encuentra actualmente la situación económica de las pymes. Se trata de una reflexión genérica sustentada en la labor de apoyo a los gestores de pymes que desarrollan día a día nuestros técnicos.

Menor rentabilidad y mayor vulnerabilidad

Nuestro punto de partida se sitúa en la crisis sanitaria de la COVID-19, que acabó afectando a todas las esferas y niveles de la sociedad. La pandemia provocó que en 2020 se registrara una disminución histórica en la facturación de las empresas españolas. Es importante tener presente que el 99% del tejido empresarial de España está conformado por pymes que, tal y como avalan datos del Gobierno y otras instituciones como el Banco de España, han sido las mayores afectadas por esta crisis.

A través de diversos estudios hemos podido poner en cifras esta pérdida de rentabilidad y aumento de vulnerabilidad económica de las pymes. Por ejemplo, siguiendo el registro de la Central de Balances Integrada (CBI), las empresas españolas sufrieron en 2020 un descenso del 14,3% en su facturación. Además de un menor nivel de ventas, el Colegio de Registradores de España estimó que en 2020 la rentabilidad financiera de las pequeñas y medianas empresas se redujo un 25,5%.

En consecuencia, aumentó la proporción de pymes con rentabilidad negativa. Tras superar este complicado 2020, en 2021 la economía de las pymes empezó a mejorar en general. Especialmente en algunos sectores, como el industrial o el energético, la rentabilidad se elevó significativamente. No obstante, al comparar los datos con respecto a 2019, todavía quedaron lejos los resultados precovid.

Endeudamiento y problemas de liquidez

Los últimos datos proporcionados por el barómetro del Consejo General de Gestores Administrativos nos indican que a día de hoy todavía hay un elevado porcentaje de pymes con diversos problemas económicos. Más de 700.000 pequeñas y medianas empresas presentan problemas de liquidez. Lo que se traduce en que hasta un 13% tiene graves dificultades para pagar deudas a los acreedores y un 10% para pagar deuda a las entidades financieras.

PIB e inflación

A la ardua situación de la economía de las pymes se suman factores clave como las previsiones de crecimiento del PIB español y la presión inflacionista. De la mano del Instituto Nacional de Estadística (INE), ya hemos podido saber que en el primer trimestre de 2022 el PIB se ralentizó un 0,3% con respecto al cuarto trimestre de 2021. Este dato se encuentra por debajo de la estimación que había realizado el Banco de España, que esperaba un crecimiento del 0,9%.

Pese a ello, el crecimiento interanual del PIB es del 6,4% frente al 5,5% del trimestre anterior. A esperas de que el Banco de España comparta su previsión actualizada, su última estimación sitúa la tasa de crecimiento del PIB para 2022 en el 4,5%. El Gobierno de España, a fecha de 29 de abril, recortó su previsión del crecimiento del PIB al 4,3% para este año. Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) espera para este 2022 un crecimiento del 4,8% y del 3,3% para 2023. Así, la mayor parte de los pronósticos nos llevan a olvidarnos del crecimiento por encima del 5% que se esperaba a finales de 2021.

La inflación también juega un papel crucial a la hora de valorar la economía de las pymes. Desde hace meses, se viene hablando de la subida de los precios y cómo está afectando tanto a las pymes como a los bolsillos particulares. La tendencia del IPC en el último año ha sido al alza, habiendo registrado en marzo un récord interanual desde 1985 al situarse en el 9,8%.

Según el dato adelantado del mes de abril, la inflación se sitúa en el 8,4%. Por el contrario, la tasa de inflación subyacente -que excluye del cómputo el precio de los productos energéticos y de los alimentos- se disparó un 4,4%, un punto por encima del incremento de marzo (del 3,4%) y la más alta desde diciembre de 1995. Este dato muestra que el contagio que se está produciendo a otros bienes.

Empleo y afiliación a la Seguridad Social

En los últimos meses, se habían registrado disminuciones en la tasa de desempleo y aumentos en la afiliación a la Seguridad Social. Sin embargo, el último adelanto de la Encuesta de Población Activa (EPA) marca cierto cambio. Este avance de la EPA del primer trimestre de 2022 indica que el número de ocupados se redujo en más de 100.000 personas y el paro aumentó en 70.000 personas. Para valorar el impacto de estas estadísticas, resulta esencial considerar el efecto estacional de la campaña de Navidad y verlas con cierta perspectiva.

Por ejemplo, en los últimos 12 meses el empleo ha experimentado un crecimiento del 4,57% con un total de 878.000 personas incorporadas al mercado laboral. Por lo que, de momento, el adelanto de la EPA del primer trimestre de 2022 no tiene por qué indicar una tendencia negativa. Aun está por ver los efectos a largo plazo de la recién entrada en vigor de la reforma laboral. Según los últimos datos del Ministerio de Trabajo, el paro se redujo en abril en 86.260 personas y se firmaron 698.646 nuevos contratos de carácter indefinido, el 48,2% del total de contrataciones del mes. Esto supone el mayor registro de contratos indefinidos de la serie histórica.

Por todo ello, el Termómetro Lyseis se sitúa en un término medio. Ni la economía en general ni la economía de las pymes atraviesan un momento fácil, pero algunos indicadores como la generación de empleo ayudan a suavizar el golpe. Como expertos en gestores de crisis económicas y operativas en las pymes, permaneceremos atentos a los nuevos datos e iremos actualizando próximamente el termómetro para seguir ofreciendo una medición económica actual. Si necesitas un diagnóstico y asesoramiento personalizado para tu empresa, no dudes en contactar con nuestro equipo. Estudiaremos cómo afectan y aplican todos estos cambios económicos al caso particular de tu negocio, realizando de forma gratuita el diagnóstico inicial.

 

Nota:

El termómetro recoge los aspectos que consideramos más relevantes en la actividad de las pymes en general. Debajo de cada uno de ellos, aparecen las novedades que entendemos que más les impactan y cómo es ese impactoEl conjunto determina la apreciación de la evolución de la economía. Si la situación empeora, la temperatura sube. Si mejora, baja.

  • PIB

Este año se preveía un importante crecimiento de la economía en el que las pymes podrían recuperar los niveles de ingresos y los resultados previos a la pandemia. Las perspectivas actuales son las de un crecimiento mucho menor, llegando a hablarse de que los riesgos de recesión están aumentando.

  • Inflación

Unos precios descontrolados son especialmente peligrosos para las empresas más pequeñas, ya que pueden verse en la circunstancia de tener que soportar subidas de precios en sus compras y no poder repercutirlas en sus precios de venta. Si al escaso poder de negociación de la pequeña empresa se une la falta de un sistema de control de costes que aporte datos adecuados para respaldar la negociación de la subida de precios, lo más probable es que la pyme pierda parte de su margen en el proceso.

  • Deuda y tipos de interés

El mantenimiento de los estímulos y de los tipos por parte del BCE son noticias muy positivas. Habrá que estar muy pendiente de su evolución en los próximos meses.

  • Kit Digital

La aparición del Kit Digital, evidentemente, tendrá un impacto positivo en las empresas. Sin embargo, será importante que su su reparto sea ágil y se abran las convocatorias a las empresas más pequeñas (menos de 10 trabajadores).

  • Reforma laboral

Aquí el sentimiento es encontrado. Es positiva en cuanto a que se ha mantenido la prevalencia del convenio de empresa respecto del sectorial (salvo para en lo relativo a salarios). Esto impacta de manera muy débil en las pymes, ya que son pocas las que tienen la capacidad de negociar su propio convenio. Con respecto a los ERTE y el Mecanismo RED, también entendemos que es positivo, al haberse generalizado las palancas de flexibilización que se aprendieron durante la pandemia. A la vez, se potencia la formación. Bien empleados pueden ser instrumentos muy útiles en la gestión de crisis empresariales.

  • Contratación

En este apartado está por ver si la reforma traerá mejoras o no. Se han reducido los tipos de contratos pero, probablemente, se ha perdido flexibilidad y en algunos casos han subido los costes. También hay bastantes dudas sobre la aplicación práctica de ciertos contratos o el contrato que corresponde a algunas situaciones.

  • Empleo

La buena evolución del empleo, según datos de abril, es muy positiva. A largo plazo deberían trasladar un impacto positivo a los ingresos de las empresas vía incremento del consumo.

En resumen, nos encontramos en un momento de incertidumbre respecto de cuál será finalmente el signo de este 2022. Muchas empresas necesitan una recuperación, al menos parcial, de sus beneficios para hacer frente al pago de los préstamos con los que financiaron las pérdidas del periodo de pandemia. Habrá que estar muy pendiente de la evolución del PIB, la inflación y de las decisiones que sobre los estímulos financieros toman las correspondientes autoridades.